Viva Fiesta. Se abre la vía de la importación y la exportación.
Durante la década de los 80, falta de producto alemán entre los establecimientos de alimentación y hostelería españoles hace que Dieter y Karin Kremers se planteen ampliar su negocio llevando especialidades alemanas a las zonas de turismo españolas y aprovechando el viaje de vuelta para llevar producto español de calidad a Alenania.
Para impulsar esta nueva línea de negocio Dieter Kremers funda la filial española en la localidad gerundense de Cabanes, muy cerca de la Costa Brava, uno de los puntos claves del turismo en España, y residencia habitual de muchos alemanes desde hace muchos años.